La capacidad de tu pequeño para comprender y utilizar el lenguaje se desarrolla a la velocidad de un rayo durante sus tres primeros años. Pero el uso del lenguaje es más complejo de lo que crees. No solo implica entender y decir palabras, sino también escuchar activamente, leer y utilizar el lenguaje corporal y las expresiones faciales, e incluso masticar y tragar alimentos.

La mayoría de los bebés y niños pequeños avanzan sin problemas por los logros del habla y la alimentación, pero algunos necesitan apoyo adicional. Pueden quedarse atrás en el lenguaje receptivo (comprensión) o expresivo (uso de gestos o del habla). O pueden tener dificultades para succionar el pecho o el biberón, o para tomar alimentos sólidos. Aquí es donde entran en juego los terapistas del lenguaje. Un terapista puede trabajar con los niños, incluso desde que son bebés, para ayudarles a desarrollar sus habilidades de comunicación y alimentación.

Cómo ayudan los terapistas del habla y lenguaje al desarrollo

Hay muchas formas en las que un terapista puede ayudar a los bebés y niños pequeños que lo necesiten, entre ellas:

Habla y lenguaje

Si los logros del habla y el lenguaje de tu niño se retrasan, o si tienen un trastorno que afecta a su desarrollo del habla y el lenguaje, pueden beneficiarse de las visitas regulares a un terapista que tenga experiencia en trabajar con pequeños que tienen dificultades con el lenguaje expresivo y/o receptivo.

Escucha activa

La escucha activa es una parte importante del lenguaje receptivo. Los pequeños no solo tienen que ser capaces de oír lo que se dice, sino también de prestarle atención. Algunos ejemplos de escucha activa son la capacidad de responder a preguntas, participar en una conversación y seguir instrucciones. En el caso de los más pequeños, la escucha activa es todavía un trabajo en curso. Para tener una idea general de lo que puedes esperar de tu bebé o niño pequeño, los logros y actividades de nuestro programa de desarrollo BabySparks pueden ser útiles.

Conciencia fonológica

Tu bebé o niño pequeño no leerá todavía, pero las habilidades de lectura temprana comienzan en la infancia y continúan desarrollándose durante la primera infancia y el preescolar. Los niños pequeños que tienen dificultades para producir los sonidos de las letras o para entender los conceptos básicos de la rima pueden beneficiarse de la ayuda de un terapista.

Habilidades sociales

La terapia del habla y el lenguaje también se ocupa del lenguaje pragmático, que abarca las complejas «reglas» de la comunicación social, como los cambios en la voz o la expresión facial de una persona que pueden indicar un cambio de emoción, o la forma en que las conversaciones suelen ir de un lado a otro. Un terapista también puede trabajar en el uso de los saludos, la reducción de las interrupciones y el uso de una voz más tranquila cuando sea apropiado, como en la guardería o en la biblioteca.

Tragar y alimentarse

Algunos bebés y niños pequeños nacen o desarrollan problemas que afectan a su capacidad para masticar y/o tragar. Esto puede deberse a problemas como la sensibilidad oral o la debilidad de los músculos orales. Un terapista puede ayudar a introducir a los pequeños en nuevas texturas, o ayudarles a fortalecer y coordinar sus músculos orales-motores para masticar y tragar correctamente.

Si te preocupa el desarrollo del habla y el lenguaje o de la alimentación de tu bebé, un terapista del habla y del lenguaje puede evaluar a tu niño y determinar si podría beneficiarse de los servicios que ofrece. Cuanto antes se identifiquen los problemas, mejor.